Debe jurar que lo logó.
Como siempre ha creido,
que lo consiguió esta vez,
aunque parecía difícil.
No, no lo ha hecho,
digamos que estoy en período de reposo,
digamos que no quiero ser yo quien termine lastimandole,
y que estoy a la espera de que termine de despertar.
Probablemente nunca lea esto,
pero como es más para mi que para usted,
de este lado, afirmo que nada pasa,
estoy bien.
Que me sigue pareciendo que actúa impulsivamente,
y que no importa cuanto lo intente usted,
no lo va a lograr.
Que se deja llevar por lo que cree ver,
y que no ve más allá de su nariz.
Entiendo la etapa en la que se encuentra,
y estaré aquí cuando abra los ojos a la luz,
de este lado le espera el abrazo de costumbre,
el silencio que le deja hablar,
la palabra que conforta.
Besos en el alma, amigo ausente,
de este lado del río se le sigue queriendo.